Desde que salí del Cantábrico deseaba llegar al Alto Pirineo, y cada vez que veía sus colosales montañas a lo lejos desde la parte del Pirineo de Navarra, deseaba llegar cada vez con más ímpetu a sus pies. Así que cuando llegue a Sallent de Gallego, me prepare. Porque estaba decidido hacer el Colosal Balaitús, por la vertiginosa Brecha de Latour. Así que cuando llego el momento, me calce la mochila para seguir por la senda del GR11 de mi Romántica Travesía de los Pirineos (Una Transpirenaica a pie muy peculiar). Empecé a subir para el refugio de Respomuso, donde iba a pasar la noche y poder guardar todas mis pertenencias en las taquillas, para empezar hacer cima al Balaitús… Desgraciadamente, en el último paso de la Brecha de Latour, me clavé un crampón (De esto hablaré en profundidad en un especial). Por suerte solo fue una herida un poco violenta, pero nada que me impedirá seguir mis pasos por la Transpirenaica a pie. Al dejar atrás el Refugio de Respomuso, también dejé atrás la ruta del GR11, pero obviamente continuaba mis pasos por la Transpirenaica, solo que ahora iba a hacer un tramo de Ibón 3000 hasta llegar a al refugio de Wallon, pasando por el Collado de la Gran Facha y entrando a Francia.